Dentro de las principales variables de la vida saludable, encontramos la variable descanso. Junto a una dieta equilibra y la práctica de deporte, el descanso es de suma importancia para nuestra calidad de vida.
Se recomienda dormir entre 7 y 9 horas diarias. Pero, si eres de a los que les resulta imposible cumplir con esta rutina de sueño, no te preocupes. Te traemos una serie de consejos para un buen descanso.
Puntualidad
El sueño está vinculado al ritmo circadiano. Este ritmo permite a nuestro metabolismo disponer de más energía durante las horas de luz y prepararse para el descanso cuando baja la luz. Si acostumbramos a nuestro cuerpo a estos ritmos, ¡dormiremos mucho mejor!
Y recuerda ser regular con tus horarios, para que tu cuerpo se acostumbre a este ritmo y favorezca mejores condiciones para un buen descanso.
¡Cuidado con las siestas! Aunque son regeneradoras cuando son cortas, las siestas demasiado largas e irregulares afectan negativamente a la calidad del sueño durante la noche. Lo ideal es que no se alarguen más de 30 minutos.
Nutrición
La digestión afecta a la calidad del sueño. Por lo tanto, evita comer demasiado tarde. Lo ideal es comer tres horas antes de irse a dormir. Además, es importante evitar las cenas demasiado pesadas o difíciles de digerir.
Los hidratos de carbono son un excelente aliado del sueño reparador. Por el contrario, las sustancias estimulantes como la cafeína, las bebidas azucaradas, el alcohol y la nicotina deben evitarse a toda costa.
Actividad física
Realizar una actividad física es muy importante. Ayuda a conciliar el sueño, ya que hacer deporte estimula las endorfinas que ayudan a relajarse.
Sin embargo, es importante no realizar actividades físicas después de la cena. La adrenalina y el flujo sanguíneo al cerebro predisponen al cuerpo al esfuerzo y son enemigos del buen sueño.
Entorno
La clave para un buen descanso es hacerlo en un entorno cómodo. La habitación debe ser tranquila y oscura. Pero, lo ideal sería dejar pasar la luz del amanecer para que tu cuerpo esté preparado para despertar.
La temperatura también es importante: debe oscilar entre los 18 y los 21 grados.
La cama, el colchón y la almohada deben ser de calidad y permitir una postura óptima.
Relajación
Otro consejo para un buen descanso es relajarse. Puedes meditar, darte un buen baño caliente, escuchar música relajante o leer un libro. También puedes probar técnicas de relajación y alivio del estrés.
Al relajar tu mente y tu cuerpo, podrás disfrutar plenamente del sueño. Esto también es muy útil cuando no se puede conciliar el sueño.
Posición
La posición en la que dormimos puede ayudar o dificultar un buen descanso nocturno. Las posiciones ideales son de lado y boca arriba. Una es preferible a la otra en función de ciertas conjeturas.
La posición prona, es decir, boca abajo, debe evitarse a toda costa.
Luz azul
Se recomienda evitar o eliminar el uso de dispositivos electrónicos como ordenadores, tablets y teléfonos antes de ir a dormir.
La exposición a la luz azul de las pantallas estimulan los circuitos cerebrales. Esto impide que se secrete melatonina, la hormona del sueño. Por esto, la conciliación del sueño se vuelve más complicada.
Consulte a un médico
Si aún siguiendo todos estos consejos para un buen descanso, sigues sin poder descansar, consulta con un profesional. Consultarlo con un médico para que te ayude a resolver tus problemas será la mejor opción.
Como hemos comentado, el entorno desempeña un papel fundamental a la hora de garantizar un sueño reparador. En este caso, Bdhome cuenta con todo lo necesario. Con unos diseños únicos y con la máxima calidad, en nuestra tienda online podrás encontrar el ambiente perfecto para ti.
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